PURIM 2013

Este sábado 23, por la noche, comienza la fiesta de Purim. Una festividad en donde el pueblo judío celebra el haber sobrevivido a los ocultos planes de un malvado ministro.

La historia es la siguiente:

El rey persa Ajashverosh celebró una gran fiesta que duró seis meses, en algún momento le pidió a la reina Vasthi que lo acompañara a uno de los grandes banquetes para poder exhibir su hermosura ante los invitados. Ella se negó.

Enfurecido, el rey consultó a sus astrólogos quienes inmediatamente le aconsejaron separarse de ella y buscar a una "reina mejor", porque de lo contrario ahora todas las mujeres le faltarían el respeto a sus esposos y sería una gran humillación para el rey y los oficiales.

Así lo hizo el rey, y envió además cartas a todos los países en su propia lengua, diciendo que los esposos deberían ser los amos de sus hogares y que la familia no debería hablar la lengua de su esposa.

Para elegir a la nueva reina, se organizó un "concurso" en donde todas las jóvenes vírgenes serían llevadas a la capital y ataviadas con maquillaje para realzar su belleza. Entre ellas se encontraba una chica llamada Hadasa, conocida como Esther, cuyos padres habían muerto, siendo entonces adoptada por su primo Mordejai.

Después de un año, Esther fue llevada ante el rey, quien cautivado por su belleza le permitió pedirle lo que ella quisiera; pero Esther no pidió más de lo que ya se había dado, lo cual fue muy bien visto dentro de la corte de Ajashverosh, finalmente él decide que Esther será reina.

Tiempo después, Mordejai se entera de que dos sirvientes del rey planean matarlo y se lo informa a Esther, ella lo dice inmediatamente al rey citando la fuente de la información, y entonces manda a colgar a los traidores.

Poco después, Ajashverosh sube de rango a un oficial llamado Hamán, y ordena que todos los sirvientes que están a la entrada del palacio tienen que arrodillarse ante su presencia. Mordejai solía pasear por la entrada para tener noticias de su prima Esther, y cuando se enteró de la orden de postrarse de rodillas se negó.

Muchas veces le dijeron los sirvientes a Mordejai, que debería seguir las órdenes y arrodillarse ante Hamán; pero él no les hizo caso, de manera que entonces le informaron a Hamán de la negativa de Mordejai y le revelaron que era judío. Hamán entonces, decide tomar venganza planeando la destrucción de todos los judíos del reino de Ajashverosh.

Hamán le dijo al rey que había una nación dispersa entre las naciones, que tenía sus propias leyes y que no seguían la ley del rey, y por lo tanto no era conveniente dejarlos con vida. Ajashverosh aprobó entonces la orden de destruir al pueblo judío.

Mordejai le envió mensaje a la reina Esther con todos los acontecimientos, y le pidió a ella rogar por su pueblo. Al principio ella se negó, pues estaba prohibido presentarse ante el rey sin haber sido ordenado; pero después asume las consecuencias de esta acción cuando su primo le recuerda que ella también es judía y que tendrá el mismo destino aunque esté dentro del palacio, y le dice claramente que si ella no busca justicia otro lo hará, pero mientras tanto su casa y la casa de sus padres perecerán.

Entonces Esther organiza un gran banquete y se presenta ante el rey para pedirle que ordene la presencia de Hamán. Ajashverosh le concede esta petición.

Durante el banquete, el rey le ofrece a Esther cumplir todo cuanto ella pida, entonces la reina le suplica por su vida y la de su pueblo. Cuándo Ajashverosh le pregunta quién es el malvado que los persigue, ella señala a Hamán, en ese momento el rey entra en furia tanto por las declaraciones de Esther como por la confesión de uno de los oficiales que le informa que Hamán había mandado construir una horca para colgar a Mordejai el hombre que le había ayudado descubriendo el plan de matar al rey.

Resultado: Hamán y sus diez hijos son mandados a colgar, y el rey gira la orden que todos los judíos tienen derecho a defenderse del ejército que atacará. Los judíos ganan, y Mordejai es nombrado primer ministro.

De la historia de Purim aprendemos lo siguiente:

• Nada es casualidad, Dios está presente en cada una de nuestras acciones aunque no lo notemos. De hecho, el libro de Esther es el único de la Biblia en donde no se menciona a Dios, pero está ahí protegiendo a su pueblo.

• No hay mal que por bien no venga. Tanto el mal como el bien provienen de Dios, todo tiene una finalidad aunque en ocasiones no alcancemos a vislumbrar cuál es.

Es por estas razones que en Purim se acostumbra hacer una gran celebración festejando la salvación del pueblo judío. Se usan máscaras y disfraces para recordar el "rostro oculto" de Dios, y se bebe hasta no distinguir entre "maldito es Hamán" y "bendito es Mordejai", para entender que tanto el bien como el mal son obra de Dios.