COMPARTIR LA LUZ
Hace poco escuché de un rabino, que una de los cosas más importantes para un gentil es compartir la luz.
Sabemos que el pueblo de Israel es luz para las naciones, de ellos recuperamos los preceptos que el Eterno entregó a los B'nei Noaj y así volvemos al camino que nos corresponde.
Cuando un gentil ha sido iluminado, está obligado de alguna manera a compartir esa luz, a iluminar a otros para que construyan paz, servir de esa manera al Eterno y cumplir así su misión en el mundo.
La mejor manera de compartir la luz es a través de la comunidad, la cual fortalece la emuná, la fe. La emuná nos fortalece, es la certeza de que sabemos cual es nuestro camino y cómo seguirlo. Somos más fuertes cuántos más compartimos esa luz y esa sabiduría.
De hecho es lo que tratamos de hacer desde este espacio, compartir la luz. Aunque quizá todavía no lleguemos a tantas personas como quisiéramos, pero con esfuerzo y paciencia nuestra comunidad se hará cada vez más grande.
Así que la enseñanza de hoy es compartir la luz, fundar comunidades, esparcir el conocimiento.
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